El brécol, también conocido como brócoli o bróculi, es la inflorescencia terminal de la planta comestible del mismo nombre, cuyas cabezuelas florales se presentan sueltas y flojas. Aunque existen variedades moradas, azuladas, amarillas y blancas, su color es generalmente verde.
Posee un tamaño menor y un sabor más suave que la coliflor, planta con la que se encuentra íntimamente relacionado desde el punto de vista botánico. Sin embargo, a diferencia de esta última, el brécol no presenta una pella compacta, sino que sus repollos están formados por pequeños ramilletes de flores comestibles denominados turiones. Aunque el brécol puede encontrarse en el mercado durante todo el año, es en la época de invierno cuando presenta las mejores propiedades y , por tanto, la mejor temporada para su compra. Por su aspecto el brécol se asemeja a la coliflor, su sabor recuerda más el del espárrago. El brécol se suele cocinar del mismo modo que la coliflor, tanto crudo como cocido. Sin embargo, los tallos verdes de esta hortaliza se pueden preparar del mismo modo que los espárragos, empleándose para la elaboración de diversas sopas y purés.
Información Adicional:
Compuesta mayoritariamente de agua, de bajo aporte calórico y mucha fibra. Contiene importantes cantidades de calcio, potasio, magnesio, fósforo, hierro y zinc. Sus vitaminas más destacadas son la C, B1 y el ácido fólico.